Garras y colmillos

by - 21 mayo

La portada de Garras y colmillos, de Jo Walton. Frente a una ventana de piedra con forma de arco ojival que deja ver un paisaje de montañas al fondo, un río que se acerca y bosques alrededor, un dragón rojo está apoyado en una superficie de piedra algo más clara que la de la ventana. Puede ser una barandilla o una mesa. El dragón tiene la mano derecha sobre la izquierda y las alas recogidas, como si estuviera sentado sobre sus cuartos traseros. Tanto la parte superior como la inferior a esta imagen tienen un dibujo como de tela color crema con arabescos más oscuros. A medias entre la zona crema y la imagen, un cuadrado rojo con reborde a modo de marco que contiene el título en mayúsculas. Justo encima pone "La mejor novela de fantasía del año" y, debajo, "Galardonada con el premio mundial de fantasía en 2005". En la zona inferior, en un cuadrado semejante, el nombre de la autora. Como fondo a la portada, un tejido de color granate con pequeñas cruces en dorado, como si fuera la cubierta de un libro antiguo. A modo de sello, en la zona inferior derecha, el contorno de un panda rojo. Sobre el mismo fondo que parece encuadernado y con el mismo sello del panda rojo en la zona inferior derecha, la ficha técnica. Título: Garras y colmillos. Autora: Jo Walton. Editorial: Factoría de ideas. Año: 2005. Traducción: Marta García. Original: Tooth and Claw (2003). Etiquetas: dragones, victoriano, familia, romántica, social



¡Hola!

Empecé este libro hace casi un año por otro proyecto. Era una relectura y acabó parado en el capítulo 8. Por lo que he releído de mis impresiones de entonces, me chocó las prioridades que tenían en ese mundo, la indefensión de las hembras (no solo tienen manos en vez de garras y necesitan herramientas para cazar, sino que su color de piel cambia según ciertas circunstancias sociales y otras formas sutiles-no-tan-sutiles de control) y la forma de pensar de algunos personajes.

Este mes he tenido un parón de lectura relativo y hoy me ha llegado la chispa, ha sido el momento de sacudir los hombros y decidir terminar con proyectos pendientes, empezando por este. Así que aquí estamos, con Garras y colmillos, de Jo Walton; publicado por Factoría de ideas.

Recuerdo cuando acabé de leerlo la primera vez. Me encantó. Era una novela de estilo victoriano como pudiera ser una novela de Jane Austen, con familias de muchas hermanas buscando marido (y Austen las casaba a todas en el mismo libro, no como las sagas de romántica más actuales, que cada hermane tiene su propio tomo), pero con dragones. Que fue algo que me chocó y me sigue chocando, pero a la vez me encanta (los dragones, no el toque a Jane Austen). Todos los detalles que eso supone. Desde dónde viven a cómo crecen o costumbres sociales o las distinciones de clase.

En esta ocasión, quizá porque había aspectos que recordaba y las elucubraciones en ese sentido estaban más tranquilas, me ha dado más tiempo a fijarme en toda la crítica social que hay. En general, la forma que tiene de mostrar comportamientos, plantear ideas, sugerir injusticias o manipulaciones. De dejar caer cosas para que ates cabos. ¿Quiere eso decir que la novela ha perdido adrenalina? No. Sigue manteniendo toda la emoción. Y la he disfrutado un montón, aunque paradójicamente me haya costado más entrar en el mundo porque no recordaba los primeros capítulos tan oscuros. Pero eso no me ha impedido fijarme en detalles en los que antes no había caído.

¿Habrías pensado alguna vez que la última moda en la capital de una nación draconiana serían los sombreros?


Sinopsis

Este es un libro curioso y diferente.
Narra la historia de una familia que se enfrenta a la muerte de su padre, de un hijo que acude a la ley para reclamar su herencia, de otro que se atormenta con la confesión que le hizo su progenitor en su lecho de muerte; de una hija que se enamora, de otra que se implica en el movimiento abolicionista y de una más que se sacrifica por su marido.
Salvo que todos los protagonistas de esta historia son dragones de garras y colmillos ensangrentados...

Tenemos aquí un mundo de políticos y estaciones de ferrocarril, de cortejos y mansiones en el campo... Un mundo en el que al morir un anciano, los miembros de su familia se reúnen... Una sociedad en la que los miembros más poderosos se aprovechan de sus privilegios para hacerse más fuertes.

You May Also Like

0 comentarios

¡Gracias!